- label Qué es
Aunque todos sabemos que el papel procede directamente de la tala de los árboles, lo cierto es que en muchas ocasiones no nos paramos a pensar en cuál es el proceso de blanqueo de papel realmente. El papel se fabrica con pasta o pulpa de un color crema y en la cual podemos encontrar lignina, que es un compuesto que une estas fibras de madera.
Sin embargo, aunque diariamente estamos en contacto con papel sin blanquear, como, por ejemplo, puede ser el color de papel de las bolsas del pan o el color del packaging de los correos que nos envían mediante paquetería, lo cierto es que también encontramos muchísimo papel blanco, como, por ejemplo, el papel de cocina, el papel del baño o el papel de imprimir.
Todo esto nos indica que para blanquear el papel se utilizan distintos métodos, de modo que cambiamos de este color amarillento original hasta uno blanquecino que nos permite, sobre todo en el caso de la impresión, poder utilizar tinta negra y de colores. A continuación, queremos hablarte de estos métodos para blanquear el papel tanto del papel normal como del reciclado.
Métodos para blanquear el papel
Como comentamos, pese a que no todo el papel que se extrae de la tela de los árboles se blanquea, lo cierto es que la gran mayoría que se utiliza en el mundo de la impresión sí. El proceso de fabricación de papel consiste en eliminar parte de la lignina mediante distintas técnicas que ayudan a blanquear la pasta, sin embargo, si esta se elimina por completo, las fibras quedarían debilitadas y, por lo tanto, el papel se estropearía.
Es por este motivo que se utilizan distintos métodos de blanqueamiento de papel que queremos explicarte a continuación:
- Método TCF. Es el tipo de método de blanqueamiento de papel menos perjudicial para el medio ambiente, ya que en este caso hablamos de un tipo de blanqueamiento sin cloro. Aquí, el agente que se utiliza para blanquear el papel es agua oxigenada o hidrosulfito sódico, ambos no tóxicos. Este sistema es más minoritario, puesto que requiere de una maquinaria, instalaciones y costes concretos, pero cada vez se emplea de forma más habitual. Además, otra de las principales ventajas es que este tipo de blanqueamiento también utiliza muchísima menos agua. El agua se puede reciclar dentro de este proceso, de modo que, asimismo, también resulta más fácil tratar las aguas residuales. Por todo esto, este modelo es el que presenta más beneficios.
- Método ECF. Hablamos del tipo de blanqueamiento de papel más habitual en la industria y que se utiliza en casi el 85% de la pasta química a nivel mundial. En este caso, se utiliza dióxido de cloro para sustituir al método con cloruro elemental, que es muchísimo más tóxico y que está prohibido en algunos países.
- Método PCF. Este es el tipo de método de blanqueamiento de papel que se utiliza, sobre todo, a la hora de blanquear el papel reciclado. Por este motivo, en este caso también hablamos de que se utilizan los mismos componentes químicos que con el papel TCF y, por lo tanto, nos encontramos ante un proceso en el que no se hace ningún uso de cloro.
Es importante destacar que la mayoría de organizaciones ecologistas y una parte de la industria papelera abogan porque se extienda el método de blanqueamiento de papel TFC, puesto que como hemos comentado, este es el que menos repercute en el medio ambiente. Sin embargo, también cabe mencionar el hecho de que aunque la industria papelera utiliza en su mayoría el método TFC, la cantidad de contaminantes que este genera es insuficiente como para que se considere peligroso.
Con todo esto, se puede decir que la industria de fabricación de pulpa de papel va mejorando continuamente sus procesos. La mayoría de tecnologías ECF van reduciendo sus químicos y tratan de optimizar lo máximo posible la pasta de papel para obtener unos resultados óptimos sin la necesidad de exponer los papeles a productos químicos contaminantes. Así y con todo, en la actualidad, se considera que esta es una industria bastante responsable con el medio ambiente, sea cual sea el método que utilice para blanquear el papel.
¿Cómo es el blanqueamiento del papel reciclado?
El papel reciclado es una de las mejores alternativas al papel virgen habitual, ya que en este caso hablamos de un papel menos contaminante y, sobre todo, que hace uso de un sistema de aprovechamiento. El papel reciclado es aquel que se extrae de los desechos del preconsumo y del postconsumo o, lo que es lo mismo, de todo el papel que no se utiliza durante el proceso de fabricación de papel y de una recogida selectiva de aquel papel que ya ha sido utilizado y al que se pretende dar una nueva vida.
Por este motivo, el papel reciclado trata en gran manera de optimizar los recursos todo lo posible para contaminar menos y ayudar a maximizar el uso de los papeles para preservar los bosques. Es por esta razón también que el papel reciclado utiliza muchísimas menos sustancias contaminantes que el papel normal porque su fabricación es menos nociva para el medio ambiente.
De esta manera, si hablamos del papel reciclado tenemos que tener en cuenta que este tiene una textura y un aspecto ligeramente más rugoso, poroso y amarillo que el papel blanco. Aun así, este cumple las mismas funciones que el papel blanco y, de hecho, en muchísimas industrias, como la del packaging, se prefiere y se utiliza más a menudo el papel reciclado que el papel blanco.
Con todo esto, también es posible blanquear el papel reciclado, aunque como decimos no suele ser tan necesario ni habitual, pero para ello se utilizan procesos libres de cloro en su mayoría como el método PCF, que hemos mencionado en el apartado anterior. De esta forma, el agente blanqueador que se utiliza en este caso es el agua oxigenada o el hidrosulfuro sódico, ambos químicos no tóxicos que ayudan a que con este proceso de reciclado el papel pueda reutilizarse de una forma no contaminante.