Características y prestaciones del papel para pintar

El arte de la pintura nos permite —y nos ha permitido desde siempre— expresarnos mediante la utilización de diferentes pigmentos y crear las más bonitas y maravillosas obras que existen en el mundo. Ahora bien, no todo el papel es válido para pintar, al menos si deseamos obtener un acabado de calidad. Para que este soporte cumpla con su función, es importante que tengamos en cuenta sus características y prestaciones, además debe ajustarse al tipo de pintura que vayamos a utilizar. A continuación, te explicamos cómo debe ser el papel para pintar (tanto si es pintura a pastel, acuarela o acrílica, entre otras). ¡Sigue leyendo!

Características del papel para pintar

Lo primero que hay que tener en cuenta es que no es lo mismo un papel para dibujar que otro para pintar. Mientras que el primero sirve exclusivamente para dibujar, como es el caso del papel para planos de arquitectura, el segundo cumple con las dos funciones. Es decir, puede servir tanto para dibujar como para pintar. Estas son las características que debe reunir el papel para pintar.

Capacidad de absorción y gramaje del papel para pintar

Una de las características más destacadas del papel para pintar es su capacidad de absorción. Esto resulta muy recomendable para técnicas húmedas ya que debe absorber la pintura para que se plasme en él y evitar que se arrugue por la humedad. En las técnicas más secas el gramaje puede ser inferior. Lo ideal, en cualquier caso, es que el gramaje del papel para pintar nunca sea inferior a 80 g/m² ya que en caso contrario es posible que dé lugar a transparencias. Ten en cuenta que en los casos más exigentes de técnicas de pintar húmedas se necesitará un gramaje de al menos 300 g/m².

La textura del papel para pintar

Otro de los aspectos que debes tener en cuenta a la hora de elegir un buen papel para pintar es la textura que este ofrece. Indicábamos más arriba que todo depende del tipo de pintura o técnica que se vaya a usar, así pues, podemos distinguir entre los siguientes tipos:

• Papel rugoso para pintar: Este papel se usa y se deja secar sin alisarlo ni prensarlo. Se caracteriza por tener una superficie muy texturizada o con poros y es el más recomendado para pastel, acuarelas o para obras con técnicas mixtas (húmedas y secas).
• Papel satinado para pintar: Este tipo de papel puede ser satinado en frío (CP) o satinado en caliente (HP). La principal diferencia entre uno y otro es que el primero de ellos se fabrica mediante la superposición de pliegos que quedan ligeramente comprimidos y le confieren una superficie texturizada, semi áspera y muy conveniente para tizas. El papel satinado caliente, por el contrario, es un papel que ha pasado a través de rodillos calientes para tener una superficie más lisa y plana. Idea para tinta y pinturas más líquidas.

La resistencia del papel para pintar

La resistencia del papel es algo que va de la mano del gramaje o capacidad de absorción de este soporte para pintar. Es importante tener en cuenta el gramaje, como indicábamos, pero también escoger un papel fabricado con materia prima de calidad para garantizar su vida útil a lo largo de los años.

Papel continuo blanco para pintar

Aunque pueda resultar obvio, es importante que, a pesar de todas las características mencionadas, el papel para pintar sea de color blanco. Ahora bien, si quieres darle un toque más vintage también puedes optar por un papel beige o marrón, como el del papel pergamino o el papel reciclado sin blanquear. El papel continuo blanco es uno de los soportes más populares para pintar. Este, a diferencia de otros papeles, viene presentado en formato de rollo, lo que te da la posibilidad de definir la dimensión ya que continúa hasta donde tú desees —o, en su defecto, hasta que se acaban los extensos metros de papel—.

¿Cuál es el mejor papel para pintar a pastel?

El pastel es un tipo de pintura seca que tiene un aspecto y textura similar al de las tizas, se trata por tanto de una técnica de pintura seca. El pastel puede variar en función de la composición, habiendo materiales más duros y otros más blandos —aunque el formato siempre suele ser el mismo, es decir una barrita con el pigmento prensado—. Para responder a cuál es el mejor papel para pintar a pastel lo más aconsejable es que el papel tenga un gramaje mínimo de 90 g/m² y máximo de 160 g/m². Lo ideal es que cuanto más rugoso sea el papel para pintar con pastel mejor, para que absorba de manera más eficiente los pigmentos y el polvillo que deja.

¿Cuál es el mejor papel para pintar acuarela?

Lo ideal es que el papel para pintar acuarela tenga un gramaje mínimo de 300 g/m² ya que es una técnica de pintura muy húmeda. Es decir, para la acuarela se utilizan colores que se disuelven con agua y la pintura se obtiene por la aglutinación de los pigmentos secos mezclados con arábiga.

¿Cuál es el mejor papel para pintar acrílico?

La pintura acrílica es otro tipo de pintura utilizada con técnicas húmedas que requiere de un gramaje mínimo de 150 g/m² para poder absorber el material sin que se arrugue. Este tipo de pintura es de secado rápido, además contiene un material plastificado, ten en cuenta que la base de su pigmentación se forma con una emulsión de un polímero acrílico —generalmente, derivado del látex—. Es soluble en agua y su acabado puede ser mate o brillante.

Mejor papel para otras técnicas de pintura

Si optas por mezclar técnicas de pintura húmedas y secas entre sí es muy aconsejable que te asegures de que el papel tenga un gramaje de 150 a 200 g/m². Ahora bien, si optas por otros tipos de pintura a los explicados en este artículo ten en cuenta lo siguiente:

• Papel para pintar con lápiz: Se recomienda un gramaje de 80 a 120 g/m² y una textura lisa para difuminar al gusto.
• Papel para pintar con rotuladores: Se recomienda un gramaje de 120 a 180 g/m² y una textura lisa y muy suave.
• Papel para pintar con carboncillo: Se recomienda un gramaje mínimo de 100 g/m² y una textura de grano grueso.
• Papel para pintar con pluma y tinta: Se recomienda un gramaje mínimo de 250 g/m².
• Papel para pintar al óleo: Se recomienda un gramaje mínimo de 150 g/m². Para esta técnica se aconseja, además, que se cubra previamente el papel con una capa de imprimación para que la pintura sea absorbida de manera uniforme.

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